Que importante es hacer nuestro el espacio sonde pasamos tantas horas durante el día.
El objetivo de los primeros días, además de adaptarnos los unos a los otros, de hacernos con los compañeros, con las rutinas del día a día...es hacerte un hueco en ese espacio físico, compartido por tantos y tantas.
La diferencia entre entrar en un espacio diáfano, que no nos da ninguna calidez, a entrar a un espacio, donde hay cosas que han hecho ellos y ellas, que tienen los materiales accesibles, que encuentran todo lo que necesitan a su alcance... esta diferencia es grandísima.
Lo que intento durante los primeros días, es precisamente eso, que sea un espacio agradable para ellos, que se encuentren cómodos y que la clase sea una prolongación de sus casas, ese lugar de acogimiento donde encontrarnos a gusto y tranquilos.
La decoración siempre ha sido un aspecto que he cuidado mucho, es por eso, que no hay casi materiales decorativos que no hayan hecho los niños y las niñas. Encontramos en las clases de infantil mucho material decorativo hecho por las maestras y maestros o de las editoriales y revistas educativas, pero, a mi parecer es mucho más rico que ellos participen en la misma con producciones propias, llenando de significados y de momentos las paredes de nuestra clase.
Como alternativa, propongo hacer cenefas con estampaciones, como la de las manos de los niños, banderines con dibujos de ellos y ellas, móviles con material de deshecho, dibujos, cadenetas... hasta donde legue nuestra imaginación y la de los peques.
Esta es la decoración que hemos elegido...por ahora...
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Sus nombres escritos en acetato con rotulador permanente y colgados de los tubos con hilo de pescar. |
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